Tres amigas

MARCELA. Santiago, 2016. Fotografía digital

GUILLERMINA. Santiago, 2016. Fotografía digital

VICTORIA. Santiago, 2016. Fotografía digital

Queridas Marcela, Guillermina y Victoria:

Les escribo desde casa, a una mediana distancia de mi viaje a Chile. Quería agradecerles por tan generoso recibimiento y todas las conversaciones inundadas con carmenere. Por cierto, espero volver pronto porque ese vino parece un bocado de carne, un flujo masticable que recorre lento hasta su final. ¿Se inauguró el taller? Hasta que lo vi ya no le faltaba nada, más que colgar cuadros y abrirle la puerta a los vecinos para que salgan de sus casas. Anímenlos, expúlsenlos del tedio. Me disculparán la equidad de aquella última noche en casa de Guille, pero la otra mitad de la olla de carapulcra se quedó en casa de Alejandro, donde ya quedaron las instrucciones de cómo debe ser preparado y repartido este plato. Por si tienen apremio, pueden llegar a su casa con mucho vino blanco, es su favorito. Espero que la muestra en la Fundación Cultural de Providencia siga siendo visitada, para mí ha sido un honor poder ser parte y traerme bajo la manga buenos amigos, sin los cuales mi cariño solo sería un transeúnte.

Hasta el próximo avión.

Sandro